Tras finalizar el primer borrador—hace ya
veinte años— tuve un leve periodo de ansiedad. Un desasosiego transitorio producto
de un extraño suceso:
Andrés Ruiz Segarra |
Aquella fue mi
primera lección: sacar de mi cabeza todo ese magma, toda la historia, todos sus
detalles, y transmitirlos al completo; hasta quedarme seco de ellos. Esa es
ahora mi espada plateada, y estoy seguro de haberlo conseguido.
Desde el
océano renace ahora de sus cenizas con un estilo literario más pulido, pero
conservando las imperfecciones que la hicieron especial entonces, y que no he
querido derribar.
Andrés.
Comentarios
Publicar un comentario